Viaje a Asturias, Viajes por España

Viaje a Asturias y Galicia: Día 1, Oviedo

Decidimos hacer el viaje en coche para poder movernos con comodidad y exprimir el viaje al máximo, así que, después de un buen madrugón y no pocas horas viajando, con sus respectivas paradas, llegamos a Oviedo pasadas las tres de la tarde. Como no conocíamos la ciudad y la hora no era la mejor para buscar dónde comer, acabamos comiendo cualquier cosa en un restaurante de comida rápida de un centro comercial antes de dirigirnos al hotel. La verdad es que, visto con perspectiva, fue una lástima que perdiéramos una comida en la ciudad, que gastronómicamente es una joya. Sólo por la gastronomía ya valió la pena visitar Oviedo.

Vista desde nuestra habitación
Vistas desde nuestra habitación

Después de comer, por fin buscamos nuestro hotel, el Ibis Budget. Lo elegimos en base a las  tres cuestiones básicas que solemos tener en cuenta para buscar alojamiento: calidad, precio y ubicación. En este caso, se daban las tres condiciones, aunque la que más nos gustó fue la ubicación. El hotel se encuentra en el bien comunicado barrio de Monte Naranco, en las faldas de esta misma sierra, lo que hace que tenga unas vistas muy agradables. El personal fue muy amable con nosotros y nos dio consejos muy útiles sobre la ciudad, aunque no consiguieron solucionar los problemas con la conexión Wi-Fi, que llegaba con muy poca fuerza a nuestra habitación.

El casco histórico de Oviedo
El casco histórico de Oviedo

Descargamos, reposamos un poco en el hotel y nos pusimos en marcha para conocer Oviedo. El casco histórico está a solo un paseo del hotel, así que aprovechamos el trayecto. Bajamos por una de las principales calles comerciales, la calle Uria, paseamos por el Campo de San Francisco y seguimos hasta el casco histórico, perfecto para perderse y deleitarse con los detalles de su arquitectura y sus intrincadas callejuelas.

El Teatro Campoamor
El Teatro Campoamor

Para terminar la tarde, pasamos por el Teatro Campoamor y nos dispusimos a buscar dónde cenar. Preguntando a los locales, nos recomendaron una zona céntrica conocida como la Ruta de los vinos, unas calles peatonales repletas de tascas y terrazas en las que se sirven copiosas tapas junto con las bebidas.

Productos típicos asturianos
Productos típicos asturianos

Acabamos en la calle Manuel Pedregal, y optamos por ir tomando algo en cada uno de los locales. Comenzamos en la croquetería El Rebote, cuya especialidad ya revela su nombre. Por 1,30€ cada corto de cerveza, podías elegir una croqueta casera, todas ellas deliciosas. Nosotros probamos las de jalisco, queso de cabrales y cecina, y todas – con sus diferencias – nos encantaron. Después pasamos al Korova, un pequeño bar ambientado en la película La naranja mecánica, donde el corto costaba 1,20€ y pudimos elegir entre una tapa de embutido – jamón, queso, lomo y salchichón –, montadito de bacon o ensaladilla. Las probamos todas, pero el embutido destacaba por su calidad y no dudamos en repetir en los días siguientes. Como el viaje había sido largo, seguíamos hambrientos y pasamos a Los 4 gatos, un local con un diseño algo más cuidado y un ambiente más elegante, donde por 1,30€ nos pusieron un corto de cerveza acompañado de una rica tortilla de cecina – aunque aquí no pudimos elegir la tapa –. Para acabar, nos pasamos por el Mesón la Comtienda, donde nuestra cerveza, al mismo precio que la tasca anterior (1,30€), vino acompañada de una tapa con chorizos y pimientos del padrón.

Esta cena fue la forma ideal de acabar un día tan largo así que, después de una comida (y bebida) tan copiosa, nuestro pequeño paseo hasta el hotel nos vino de perlas y, por fin, nos dimos un merecido descanso para reponer energías antes de una segunda jornada muy completa.